Este 17 de octubre, el mundo conmemora el Día Mundial Contra el Dolor, una
fecha promovida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Asociación
Internacional para el Estudio del Dolor (IASP) desde 2004, con el objetivo de
visibilizar el sufrimiento asociado al dolor crónico y reconocerlo como una
enfermedad que requiere diagnóstico y tratamiento integral 1.
En Colombia, el dolor crónico se ha convertido en un problema de salud
pública. Según una encuesta realizada por la Asociación Colombiana para el
Estudio del Dolor (ACED), el 32 % de los adultos presenta dolor persistente
durante más de tres meses y un 11 % refiere dolor severo que interfiere en su
vida cotidiana 2 . Las principales causas reportadas son osteoartritis (también
conocida como artrosis u osteoartrosis), dolor lumbar, dolor de cabeza y dolor
postoperatorio 3 .
“Es importante que la población comprenda que existen dos tipos de dolor: el
agudo y el crónico”, explica el Dr. Andrey Rojas, Gerente médico de Adium. “El
dolor agudo actúa como una señal de alarma del organismo; nos indica que
algo no está bien. En cambio, el dolor crónico persiste más allá de tres meses y
deja de cumplir esa función protectora, convirtiéndose en una enfermedad en sí
misma. El tratamiento del dolor agudo es diferente del dolor crónico. De hecho,
tratar a tiempo el dolor agudo de manera integral con analgésicos que tengan
un mecanismo de acción diferente, puede evitar que ese dolor agudo se vuelva
crónico”.
En Colombia, hasta el 20 % de los pacientes que se someten a cirugías mayores
presentan dolor posoperatorio crónico (DPOC), especialmente en
procedimientos de tórax, mama o abdomen 4 . Este tipo de dolor puede durar
meses o años, afectando la movilidad y el bienestar emocional.
Un manejo inadecuado del dolor agudo postquirúrgico incrementa el riesgo de
complicaciones, morbilidad y costos para el sistema de salud 5 .
El dolor crónico no solo afecta al cuerpo, sino también a la mente. Según el
Ministerio de Salud y Protección Social, las personas con dolor persistente
tienen cuatro veces más probabilidades de sufrir depresión o ansiedad que
aquellas sin dolor 6 .
“El dolor limita la interacción social, la actividad física, interfiere con el sueño y el
descanso y puede desencadenar depresión. Se convierte en un círculo vicioso:
mientras los pacientes menos duermen, más aumenta el dolor”, señala el Dr,
Rojas.
La Asociación Colombiana para el Estudio del Dolor (ACED) recomienda un
abordaje integral y multimodal que combine medicamentos, fisioterapia, apoyo
psicológico y educación del paciente 2,7 .
Los especialistas coinciden en que el primer paso es reconocer el dolor crónico
como una enfermedad y no minimizarlo como un síntoma pasajero. Consultar
oportunamente, evitar la automedicación y acceder a tratamientos integrales
son acciones fundamentales.
“El Día Mundial del Dolor es un recordatorio de que millones de personas viven
con una condición que afecta su salud física, emocional y social. Hablar de ello,
generar conciencia y fortalecer las políticas de atención en el país es
fundamental. El manejo del dolor se ha considerado como parte de los
derechos humanos”, concluye el Dr. Andrey Rojas, gerente médico Adium.