Bogotá, junio de 2025 – En medio de la creciente preocupación por el futuro de
las Entidades Promotoras de Salud (EPS) en Colombia, surge la interrogante
sobre el destino de la información médica de los usuarios en caso de cierre de una
de estas entidades. Este escenario genera incertidumbre entre los afiliados,
quienes temen por la continuidad de sus tratamientos y el acceso a su historia
clínica.
Desde la promulgación de la Resolución 1995 de 1999, se estableció que la
custodia de la historia clínica recae en las Instituciones Prestadoras de Salud
(IPS), asegurando así el derecho de los pacientes a acceder a esta información
vital. Sin embargo, la transferencia efectiva de datos entre entidades no siempre
es fluida, lo que podría resultar en la pérdida de información crítica para la
atención médica de los usuarios.
En caso de cierre de una EPS, la Superintendencia de Salud se encarga de
asignar a los afiliados una nueva entidad promotora, la cual debe garantizar el
acceso continuo a la historia clínica de los usuarios. No obstante, las dificultades
en la transferencia de información podrían obstaculizar este proceso, afectando la
continuidad en los tratamientos médicos.
"Es fundamental fortalecer la atención primaria y mejorar la coordinación, control y
toma de decisiones dentro del sistema de salud para asegurar la equidad en el
acceso a la atención médica. La interoperabilidad de la información se presenta
como una herramienta crucial para mitigar el impacto de posibles cierres de EPS,
permitiendo un flujo continuo de datos entre las entidades prestadoras de salud"
añade Andrés Torres, Sales Executive de InterSystems Latam.
Existen diversas herramientas tecnológicas que, de ser implementadas por el
gobierno y las Entidades Prestadoras de Salud, pueden garantizar una atención
médica continua y segura para los pacientes, incluso en caso de cierre. Entre las
más comunes se encuentran:
1. Historia clínica electrónica Interoperable: Permite que la información
médica de los pacientes esté disponible para todos los actores del sistema
de salud (EPS, IPS, hospitales, etc.) de manera segura y confiable,
independientemente de la EPS a la que estén afiliados. Esto facilita la
continuidad de la atención médica, ya que los profesionales de la salud
pueden acceder a la información completa del paciente, incluso si cambia
de EPS.
2. Visor clínico: Facilita la visualización de la historia clínica de los pacientes
por parte de los profesionales de la salud, de manera sencilla y organizada.
Esto les permite tener una visión unificada del historial médico de todas las
IPS que interoperen y hayan prestado servicios al mismo paciente, lo que
les ayuda a tomar mejores decisiones sobre posibles tratamientos.
3. Portal del paciente: Permite que los pacientes accedan a su propia historia
clínica de manera electrónica. Esto les da mayor control sobre su
información y les facilita el seguimiento de su condición de salud. Además,
pueden utilizar el portal para realizar trámites como solicitar citas,
autorizaciones o consultar resultados de exámenes.
4. Telemedicina: Permite que los pacientes reciban atención médica a
distancia, utilizando tecnologías como videoconferencias o chat. Esto en un
país con la complejidad territorial de Colombia es vital, ya que en las zonas
remotas con difícil acceso a especialistas puede representar la diferencia
entre recibir atención de manera oportuna o no.