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La Industria de Alimentos en Colombia presenta su agenda de I+D+I: ‘Foodtech’

25 de noviembre de 2025 por
La Industria de Alimentos en Colombia presenta su agenda de I+D+I: ‘Foodtech’
ACIS

Bogotá, Noviembre de 2025. Según el más reciente Reporte Colombia Innova de la ANDI, la innovación dejó de ser un asunto de laboratorios aislados y se convirtió en el nuevo motor de la competitividad alimentaria. La industria de alimentos se mueve hacia un modelo en el que la ciencia, la sostenibilidad y la salud se mezclan para redefinir todo lo que conocemos sobre alimentación.


“Estamos frente a una nueva era de la alimentación. Una en la cual la innovación no sólo busca producir más, sino producir mejor. Cada avance tecnológico, cada investigación científica y cada nueva práctica en la cadena de valor de la industria de alimentos se conectan de una manera más profunda con el bienestar de las personas y del planeta. Colombia tiene el talento, la biodiversidad y la creatividad para ser protagonista en esa evolución del ecosistema alimentario, y esta hoja de ruta es una invitación a construir ese futuro con propósito”, afirma Camilo Montes, director ejecutivo de la Cámara de la Industria de Alimentos de la ANDI.


La revolución comienza desde la demanda. Los consumidores ya no buscan solamente el sabor, también buscan que los alimentos cuiden su salud, fortalezcan su bienestar y aporten beneficios concretos. Avanza la era de los alimentos funcionales, aquellos que no solo calman el hambre, sino que poseen propiedades nutricionales y en salud, que por ejemplo incorporan probióticos, antioxidantes y formulaciones específicas para distintas etapas del ciclo de vida de cada ser humano. Detrás de cada nuevo alimento hay una historia de ciencia aplicada que responde a un consumidor más informado, que entiende que la nutrición también puede mejorar la calidad de vida.


Pero la innovación no se queda ahí. También está transformando el modo en que se producen los alimentos. La economía circular está dejando de ser un discurso aspiracional para convertirse en estrategia empresarial: aprovechar los residuos agrícolas, rediseñar los empaques, reducir desperdicios y convertir los subproductos en nuevas fuentes de valor. La industria de alimentos está encontrando oportunidades donde antes había pérdidas, creando modelos de negocio más eficientes y sostenibles que fortalecen su competitividad.


A la par, la sostenibilidad se consolida como el nuevo estándar global. Hoy, los consumidores, los inversionistas y los reguladores exigen a las empresas medir y mitigar su huella ambiental. La reducción de emisiones, el uso sostenible de la biodiversidad, la gestión responsable del agua, los envases compostables y la transparencia sobre el impacto climático ya se han convertido en requisitos para acceder a los mercados más exigentes del mundo. Para las compañías colombianas, avanzar en este frente es una oportunidad para acceder a cadenas de valor internacionales y financiamiento verde.


La tecnología, por su parte, está marcando el ritmo de esta transformación. La convergencia tecnologías como inteligencia artificial, biotecnología, sensores, automatización, nutraceutica y blockchain permite a las empresas de mayor valor desde el origen y transformación de los alimentos, reducir desperdicios y anticipar fallas en la producción. El resultado es una industria más eficiente, más segura y más conectada con las expectativas de un consumidor que exige confianza y trazabilidad. La madurez digital será el punto de quiebre entre las compañías que evolucionan y las que se rezagan.


Pero el verdadero impulso detrás de esta transformación depende de la inversión en conocimiento. Según el Informe Colombia Innova de la ANDI, cerca del 60% de los recursos para I+D en Colombia provienen del sector privado, mientras que la inversión pública ha disminuido progresivamente los últimos años. Aunque este descenso podría limitar proyectos de largo plazo, también demuestra la capacidad del sector productivo para liderar la innovación. De hecho, el 44 % de la inversión nacional en I+D se ejecuta desde el sector empresarial, seguido por las universidades con un 30,8 %, una alianza que ha permitido acelerar la transferencia de conocimiento y convertir la investigación en desarrollo tangible.


“Desde la Cámara de Alimentos de la ANDI, invitamos a todos los actores del ecosistema empresarial colombiano para que cooperemos en torno al desarrollo de la agenda empresarial de I+D+I, hacemos un llamado a Universidades, Startups, Innovadores y a todos los que creemos en que cada avance tecnológico o científico en la alimentación tiene un propósito mayor: que las personas vivan mejor. Y eso solo se logra cuando la innovación se traduce en bienestar real, accesible y sostenible para todos”, concluye Montes.


A su vez, Alejandro Olaya, Gerente nacional de Innovación y Emprendimiento de la ANDI indica: “La innovación empresarial en Colombia no es solo una apuesta por la competitividad, es la manera en que el sector productivo demuestra que puede anticiparse al futuro, crear soluciones con impacto real y convertir los desafíos en oportunidades para el país".


Todo apunta a un mismo horizonte: una industria que innova con propósito. El reporte Colombia Innova de la ANDI plantea una hoja de ruta que combina ciencia, sostenibilidad y tecnología para dar forma al futuro de la alimentación. Desde alimentos que curan hasta procesos que regeneran, desde fábricas inteligentes hasta envases que desaparecen, el país comienza a cocinar su propio modelo de innovación alimentaria. Porque el futuro no se servirá en bandeja: se está construyendo, ingrediente a ingrediente, desde la ciencia y la creatividad colombiana.

La Industria de Alimentos en Colombia presenta su agenda de I+D+I: ‘Foodtech’
ACIS 25 de noviembre de 2025
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