● Estudiar en línea permite a los estudiantes equilibrar su vida personal, laboral y
académica sin sacrificar la calidad educativa.
● La Universidad de la Costa (CUC) ofrece programas virtuales diseñados para responder a
las exigencias del mercado laboral actual y a los retos de la sociedad digital
Barranquilla, julio de 2025 – La forma de aprender ha cambiado. Hoy, la posibilidad
de estudiar desde casa, sin horarios rígidos y con herramientas digitales de última
generación, representa una revolución en el acceso al conocimiento. En este
escenario, la Universidad de la Costa ha construido una propuesta educativa que no se
limita a replicar lo presencial en formato remoto, ofreciendo programas que permiten
avanzar profesionalmente.
La CUC ha asumido el reto de ampliar las oportunidades de acceso a la educación
superior mediante una oferta virtual que prioriza la calidad, la flexibilidad y la
pertinencia de sus programas. Hoy, estudiar en línea ha dejado de ser una opción
secundaria para convertirse en una modalidad efectiva, especialmente para quienes
necesitan que sus estudios sean compatibles con otras responsabilidades.
“La educación virtual elimina barreras geográficas y reduce costos para los
estudiantes, sin comprometer el nivel académico. Además, el fácil acceso a clases
desde cualquier lugar sin las limitaciones de ubicación y horarios flexibles permite a
los estudiantes gestionar su tiempo de manera más eficiente,” señala Juanita Bernal,
CEO de Higher Education Partners (HEP), entidad que establece y gestiona campus
digitales para universidades.
La flexibilidad es uno de los beneficios más valorados de la educación en línea, pero
no el único. Programas como la Maestría en Innovación y marketing y la Maestría en
Desarrollo Sostenible responden a las demandas de un mercado laboral que exige
profesionales autónomos, actualizados y capaces de aplicar sus conocimientos en
contextos reales y cambiantes.
En tiempos donde la transformación digital redefine los perfiles profesionales, optar
por una formación virtual es también una manera de prepararse para los desafíos del
presente y del futuro. Desde pregrados hasta posgrados, el modelo de la demuestra
que la formación en línea puede ser igual de rigurosa y enriquecedora que la
presencial.