Lenovo impulsa un modelo flexible para que la inteligencia artificial genere valor
real en los negocios.
Las empresas colombianas están en un momento decisivo. La inteligencia
artificial puede convertirse en el mayor motor de productividad y crecimiento,
pero solo si se implementa con una visión clara y aliados expertos que
comprendan las prioridades de cada sector. El compromiso de Lenovo es
acompañarlas en ese camino para que la innovación se traduzca en resultados
reales.
La inteligencia artificial ocupa cada vez más espacio en las discusiones empresariales, pero los
niveles de adopción todavía son modestos. Según el CIO Playbook 2025 de Lenovo, un tercio
de las compañías en Colombia continúa en etapa de planeación, lo que refleja no tanto una
falta de interés, sino la complejidad de adaptar procesos, infraestructura y cultura
organizacional a una tecnología que promete transformar la forma de hacer negocios. El
hallazgo confirma una paradoja que atraviesa al sector corporativo y es que mientras las
expectativas son altas, la puesta en práctica avanza a un ritmo mucho más cauteloso.
El entusiasmo alrededor de la IA no es casual. Sus aplicaciones abarcan desde anticipar
tendencias de consumo y optimizar cadenas de suministro hasta personalizar la experiencia del
cliente o acelerar la innovación en productos y servicios. Sin embargo, el paso de la teoría a la
acción implica más que adquirir software o dispositivos y supone repensar la manera en que se
toman decisiones, integrar fuentes de datos diversas y asegurar que la inversión esté alineada
a la estrategia del negocio, con objetivos medibles. El riesgo de avanzar sin claridad es alto y la
solución no son aplicaciones de IA listas para usar.
Lenovo propone un enfoque integral que combina acompañamiento inicial, diagnóstico
estratégico y un ecosistema tecnológico conectado —desde smartphones hasta infraestructura
híbrida— para impulsar la competitividad.
El primer paso, consiste en una evaluación detallada para identificar con las compañías en
dónde la IA puede generar el mayor impacto y, a partir de allí, diseñar una ruta de
implementación a la medida de cada organización. A este proceso se suma TruScale, un
modelo de pago por demanda, que permite a las empresas disponer de infraestructura,
dispositivos y servicios sin necesidad de grandes inversiones iniciales. Esto traslada la
discusión de la magnitud del gasto al valor real que puede generar la inteligencia artificial en
cada proceso, reduciendo riesgos y ofreciendo escalabilidad según las necesidades de cada
negocio.
“Las empresas colombianas están en un momento decisivo. La inteligencia artificial puede
convertirse en el mayor motor de productividad y crecimiento pero solo si se implementa con
una visión clara de la mano de aliados expertos que comprendan las prioridades de cada
sector. El compromiso de Lenovo es acompañarlas en ese camino para que la innovación se
traduzca en resultados reales”, afirmó Jorge Ramírez, gerente del segmento relacional de
Lenovo Colombia.
“Si bien la etapa de planeación domina en buena parte del mercado, las empresas que
definan hoy una hoja de ruta sólida y a la medida de su negocio, tendrán la posibilidad de
diferenciarse y capturar ventajas competitivas en los próximos años”, puntualizó el
ejecutivo.
El desafío estratégico es evidente. Colombia no está rezagada en la conversación, pero
tampoco puede permitirse la complacencia frente a un entorno global que avanza con rapidez.
La pregunta que deberían hacerse las organizaciones es cómo convertir su visión de negocios
en realidad y cómo garantizar que cada paso de esta transformación se traduzca en valor
concreto. Para lograrlo, contar con aliados que ofrezcan acompañamiento metodológico y
modelos de adopción flexibles será clave para transformar la expectativa en resultados
tangibles.